La Fe Baha’i: ¿Cómo puede una pequeña religión cambiar al mundo?
El viaje en que la Fe y yo decidimos cruzar nuestros caminos.
En Octubre del año pasado manifesté un viaje, quería vivir la experiencia de pasar Halloween en Estados Unidos, y poder sentirme como si estuviera dentro de una película. No tenía idea cómo ni dónde iba a ir, pero sabía que iba a tener esa experiencia. Mi intención estaba clara y firme, podía sentirlo. Un domingo mientras pasaba la tarde disfrutando los primeros calores de la primavera en el patio de mi casa, me llega un mail. Era de una señora llamada Dawn que me contactó a través de la aplicación que yo usaba para cuidar mascotas. Me contaba que se iba 15 días de vacaciones y necesitaba que cuide a sus dos gatos. Ella me invitaba un mes entero a pasar el otoño en su Bed&Breakfast que tenía en su casa en Wenatchee, Washington State.
Dije ¿Por qué no? Y me embarqué en la aventura. No conocía a Dawn pero sentía mucha bondad en su energía. Y no me equivoqué.
Pasar Halloween en Estados Unidos fue una experiencia increíble que me hizo sentir muy feliz, divertida y conectada con mi niña interna. Pero eso no era lo único que tenía ese viaje para ofrecerme. ¿Acaso se podía poner mejor? ¡Pues sí! Si mi viaje anterior fue mi Comer, Rezar, Amar; este viaje fue Rezar, Rezar, Rezar.
Cuando llegué a Washington, Dawn me fue a buscar al aeropuerto, me recibió con un gran abrazo y me dijo “no sos una huésped en esta casa, sos parte de la familia”. Cabe aclarar que éramos dos desconocidas que sólo habíamos intercambiado mensajes sobre itinerarios y vuelos, pero había algo en la energía de Dawn que emanaba amor, pureza y generosidad.
A los días conocí a su familia, y luego a sus amigas. Había algo en común en toda la gente a la que me iban presentando: eran las personas más amables que había conocido. Pero no era una amabilidad superficial para quedar bien, realmente actuaban desde un lugar amoroso, no criticaban a nadie, se quejaban muy poco - para no decir nada - me abrían las puertas a sus hogares, amigos y familias como si realmente me conocieran de toda la vida y estaban siempre ayudando a otras personas.
Y es en esas pequeñas acciones diarias que empecé a darme cuenta que no era que querían aparentar ser buenas personas, sino que son simplemente buenas personas con una gran creencia de que con pequeños buenos actos pueden cambiar el mundo. ¿Y por qué creen esto? Porque es la base de su religión.
Acá viene la parte rezar del viaje. En Wenatchee conocí una fe de la cual nunca había escuchado oír y estoy bastante segura de que vos tampoco: La Fe Baha’i.
La Fe Baha’i
¿Y qué es la Fe Baha’i? Resumidamente puedo decir que es una religión que busca el mejoramiento del mundo a través de la unidad global y la paz mundial. Su objetivo principal es crear un mundo donde la diversidad sea celebrada y la humanidad viva en colaboración y comprensión mutua.
No voy a mentir que cuando me empezaron a contar de la religión empecé a preguntarme si sería algún tipo de secta o culto, es que veía a personas tan buenas y felices que se me hacía raro. De hecho, el día que fui a la lectura de uno de los libros Baha’i, le pregunté a ChatGPT si era una secta. *Quiero aclarar que fui yo la que empecé a preguntar sobre la religión, ellxs no vinieron a tratar de hacerme creyente ya que eso iría en contra de sus creencias.
Ante la respuesta de ChatGPT mi desconfianza tuvo que ceder y aceptar que sí, que simplemente son personas buenas y amables, aunque eso me pareciera raro y me hiciera desconfiar, ya que hoy en día la crítica, la envidia y el tratar de sacar ventaja ante los demás es moneda corriente en gran parte de nuestra sociedad, no hace falta más que prender la TV o abrir Twitter para verlo.
Estaba un poco nerviosa cuando fuí a mi primera Devotional Meeting, que son las reuniones que hacen los Baha’i donde se juntan a rezar y a leer los textos de su fe. Para mi sorpresa no había un cura, chamán o gurú a quien seguir, tampoco fuimos a un templo o iglesia. Éramos aproximadamente 8 personas en la casa de una de las integrantes de la comunidad Baha’i. Nos sentamos en círculo e íbamos turnándonos para leer las oraciones y los pasajes del Libro 1: Reflexiones sobre la vida del espíritu. Pero este no era un libro como la biblia sino más como un libro de colegio que trae preguntas y actividades.
Lo que más me sorprendió fue que antes de empezar me preguntaron “¿Vos en qué crees?”. Que una religión te pregunte eso y esté abierta a cualquier respuesta que puedas darle fue sorprendente. Les dije lo que yo creía sobre Dios, sobre la vida, sobre el Universo y ellos escucharon pacientemente y no me dijeron ni que estaba bien ni que estaba mal, simplemente lo aceptaban. Después cada uno me contó su historia con las religiones y con Dios, muchas de las personas Baha’i no viene de familias que son parte de la fe, de hecho no creen que puedas heredar la fe, ellos creen que todos los niños y niñas tienen que vivir libres hasta que elijan sus creencias y su religión. Algunas de las personas que estábamos en esa reunión ni siquiera éramos Baha’i. Para ser parte de la comunidad Baha’i o para participar de sus reuniones y acciones no tenes que renunciar a tu fe o tu religión, justamente lo que buscan es la convivencia armoniosa entre religiones.
Realmente sentí que la Fe Baha’i me encontró a mi. Quería que la encuentre, no la estaba buscando, simplemente llegó en un momento de mi vida donde yo estaba abierta para recibirla, porque como ya les conté anteriormente, mucho tiempo de mi vida creer en Dios me parecía sin sentido. Y es por eso que sentí un poco la responsabilidad y las ganas de ser canal del hermoso mensaje de la Fe y poder así expandirlo a más personas.
El mes pasado entrevisté a dos personas de la comunidad Baha’i para poder compartirte esta fe que, basado en mi experiencia, tiene muchísimo para enseñarnos sobre el amor, la nobleza y el desarrollo espiritual ya sea individual pero también colectivo. Quiero agradecer a mi amiga Mary Lucas, una estadounidense que conocí en Wenatchee pero que vivió muchos años de su vida prestando servicio en Latinoamérica. Y a Zaynab Gates, una argentina con padre Estadounidense y madre del pueblo originario Wichí, que conoció a Mary cuando ella estaba viviendo en Resistencia, Chaco, Argentina. Ambas prestaron su tiempo y sus conocimientos para poder compartir más de la fe.
Ya está disponible el episodio de El fuego que llevo dentro llamado Enseñanzas de la Fe Baha'i para cambiar el mundo. Siento mucha gratitud y honor por estar compartiéndolo. Si bien todos los episodios son importantes para mí, este es uno que me llena de profunda emoción, así que no solo te recomiendo escucharlo para que conozcas a una comunidad que está realmente comprometida y unida para cambiar el mundo, sino que también te agradezco por escuchar y abrirte a repensar quizás algunas cosas con este episodio, eso ya es cambiar tu mundo y por ende es cambiar el mundo.
Si bien en el episodio hablamos muchísimo sobre el origen de la fe, su historia, sus enseñanzas, sus valores, la espiritualidad y la relación con Dios. Quiero dejarte un mini resumen de algunas cosas de la Fe Baha’i.
Conocé más sobre la Fe Baha’i
Primero quiero aclarar que la Fe Baha’i es una religión organizada pero que no tiene clero, es decir que nadie está por encima de nadie, todas las personas pertenecientes a la comunidad Baha’i son personas regulares que pueden hablar desde su experiencia sobre la fe.
Los Bahá'ís creen que Dios revela sus enseñanzas a la humanidad y continuará haciéndolo de manera progresiva. Los Bahá'ís siguen las enseñanzas de Bahá'u'lláh, la última manifestación de Dios, el fundador de la Fe Bahá'í. Él vivió no hace mucho tiempo, a mediados del siglo XVIII, es por eso que esta es la religión más nueva del mundo. El nombre Bahá'u'lláh significa "La Gloria de Dios", el fue un noble persa que se alejó de su posición de alto rango para convertirse en un gran maestro espiritual. Los bahá'ís creen que existe un solo Dios, llámalo como quieras: Alá, Jehová, Gaia, el Gran Espíritu, el Universo, no importa, pero todas las personas que adoran están rezándole al mismo Dios: una fuerza creativa que todo lo ama y todo lo conoce, en nosotros y a nuestro alrededor, así como en una cantidad infinita de otros universos más allá de este material.
Así como la humanidad necesita progresar material, social y tecnológicamente, nosotros como especie necesitamos progresar espiritualmente también. Según los Baha’i Dios se encarga de esto enviando a sus especialmente designados mensajeros y maestros para actualizar su mensaje, es por eso que todas las manifestaciones anteriores como: Krishna, Buda, Jesus, Moises, etc. son aceptadas por los Baha’i, porque en esencia sus mensajes eran siempre los mismos: que todo lo que necesitas es amor, que nuestra realidad no es que seamos solo cuerpos en un espacio tridimensional, sino que tenemos un alma o espíritu que continúa su viaje, que hay una realidad más profunda más allá y detrás de este velo físico, que si perseguimos el servicio espiritual a los demás, tenemos buenas acciones y actos de compasión, llegaremos a la verdadera plenitud y felicidad espiritual, etc. Investigá cualquier religión, y así te darás cuenta que todas tienen una misma esencia.
Además de la creencia de que hay un solo Dios y una sola religión que se va actualizando con los mensajeros de Dios, también creen que hay una sola humanidad y que todas las personas somos, en esencia, iguales. La tierra es un solo país y la humanidad, sus ciudadanos. Bahá'u'lláh vivió de 1817 a 1892, eso sucedió hace muy pocos años, es por eso que el mensaje de Bahá'u'lláh es contemporáneo a nuestra sociedad. Sus enseñanzas se centran en la unidad y hacen foco en las diferencias de raza, de clase, de economía, cuestiones de género y política. Las diferencias que nos han dividido durante años deben ser curadas, ya que somos, en este día y época, una sola familia humana y necesitamos actuar como tal.
Creas o no en esta religión hay dos opciones: O Bahá'u'lláh es un hombre muy sabio que trajo bellas, importantes, y místicas enseñanzas de paz, amor y unidad. O es quien dice ser, y es un mensajero divino enviado por Dios que dio a la humanidad lo que más necesita en esta época. De cualquier manera, trabajemos todxs juntos - ateos, judíos, cristianos, católicos, baha’i, etc. - para hacer del mundo un lugar más amoroso, justo y bueno.
Ahora que ya conocés las bases de la Fe Baha’i estoy segura que tenes ganas de seguir escuchando más. Te dejo con el episodio para que le des play y veas si resonas con el mensaje.
¡Contame qué te pareció el episodio y el mensaje de la Fe! ¿Conocías a la Fe Baha’i? Podes responderme este mail o escribirme por Instagram.